Descripción enviada por el equipo del proyecto. En la primera parada camino a casa, Ulises llega a la cueva del Cíclope, un constructor feroz y fuerte que mira a través de un solo punto. Y allí está encerrado hasta que usa su ingenio para escapar y se dirige a donde los vientos lo lleven.
La Casa Ciclópea se construye usando el vigor del constructor y el ingenio del ingeniero, para iniciar un viaje desde el lugar de su fabricación -Madrid- hasta el lugar donde definitivamente puede estar: un garaje existente, el feo patito de la zona, ubicado en un tranquilo barrio residencial de Brookline. La construcción de una planta alberga los espacios de estacionamiento, taller y servicio, siguiendo su lógica estructural básica, y se completa con la gran sala construida mediante el montaje de los grandes elementos prefabricados que descansan después de su largo viaje transatlántico. Este salón de planta libre y de doble altura incorpora las principales actividades domésticas y permite transformar el edificio residual en una unidad residencial de dos pisos, adaptada tecnológica y espacialmente a su tiempo y a la vida de sus usuarios.
La nueva arquitectura concentra la estructura y la infraestructura en el perímetro: siete vigas -de escala monumental- que se especializan cada una en una acción: cocinar y bañarse, almacenar, sentarse, comer, dormir, trabajar, proyectar. El resto de la planta se encuentra limpia para ser compartida por los diferentes eventos que suceden en el tiempo y las funciones que tienen la opción de expandirse al espacio central según sea necesario, decidiendo su disposición temporal. Las siete vigas programáticas configuran un recinto que minimiza el contacto visual con el exterior -en los tres lados vinculados con las viviendas vecinas- y crea una gran abertura en el lado de la calle desde donde se puede mirar a los árboles ubicados al frente e imaginarse en medio de un parque. Complementando al ojo, cuando las vigas se ensamblan juntas pierden su masa en los puntos de contacto, para proporcionar a las funciones específicas el ingreso adicional de luz y ventilación. La privacidad y el aislamiento térmico se garantizan, maximizando las visuales y el ingreso de la luz.
Para evitar sobrecargar la estructura preexistente o tener que cavar nuevas fundaciones, los sistemas de construcción ultraligeros dan forma a los nuevos elementos: núcleos sólidos hechos de espuma -98% de aire- reforzados por perfiles de acero resistentes al fuego con una fina capa de cemento y fibras. Las juntas secas y la ligereza de los materiales permite que los diferentes elementos se produzcan fuera del sitio -incluyendo los acabados y accesorios-, sean fácilmente transportados por barco y camiones regulares, y sean rápidamente colocados siguiendo una secuencia rítmica y cuidadosamente planeada.
A diferencia de la pesada y fría piedra que impidió a Ulises salir de la cueva, la Casa Cíclopea es ligera y cálida; ligera debido a su falta de masa, y debido a su manto de aire. Se sienta y mira sin ser vista, entrelazando sus elementos después del viaje.
